martes, 8 de noviembre de 2011

El arte de empezar... y no acabar las cosas

¿Cuántas veces nos hemos planteado empezar algo nuevo?... desde el famoso, el día 1 empiezo al gimnasio, a las clases de Inglés, las manualidades, botes de productos, los clubs "variopintos" hasta el archi conocido mañana cambio de vida.

Creo que necesitamos ir superándonos a nosotros mismos y demostrándonos que somos capaces de hacer "cosas" ...y ese sentimiento crece directamente proporcional a los años que cumplimos. También va relacionado con el Síndrome de Peter Pan... no nos engañemos... que somos muchos los que nos resistimos a crecer... pero los hay que vamos... se tiran de cabeza a los 20 años cuando están más cerca de los 40... lo triste de esto... es que cuando estén cerca de los 50 habrá cosas que no podrán recuperar por haber "perdido" el tiempo en jugar a ser eternamente joven...como por ejemplo ... apostar por uno mismo y por crear su propia familia. Hay que vivir el momento y sabiendo dónde tenemos los pies... y la cabeza.

Si miro a mi vida... siento que siempre he sido fiel a mi misma, a mis costumbres, a mis gustos, a mis "entretenimientos"... no intento demostrar nada a nadie... sencillamente intento hacerme feliz... y si puedo compartirlo y hacerlo llegar a los que me rodean. Soy culpable de empezar cosas y abandonarlas, claro... pero no es tónica general. No me gusta tirar la toalla. Prefiero no empezar algo que no terminarlo...

Me llama mucho la atención la cantidad de cosas que puede empezarse y no terminar, ¿cuántos blogs hay abandonados en el ciberespacio? ¿proyectos de falsas promesas que no llegan ni a comenzarse? ¿A quién queremos demostrar que podemos hacer algo? ¿A quién engañamos más... a los demás o a nosotros mismos? ¿por qué empezamos a hacer algo y se nos olvida terminarlo? ¿por qué dejamos tantas cosas en stand by? ¿será cuestión de los inconformistas? ¿o de los insatisfechos con prisas? Esto no me llena... ¡fuera! a otra cosa... esto no me entretiene.. ¡fuera! a por un juguete nuevo... 

¿Será que tenemos tanto... que no sabemos por donde empezar? Esto es como si a un goloso, lo llevas a una pastelería y quisiera morder todos los pasteles para ver cuál le gusta más... Ninguno lo acaba, ninguno le llena, los prueba todos y todos los deja ... empezados... y sin terminar.






1 comentario:

  1. Es verdad, tantas cosas pequeñas por hacer en este mundo tan grande, que el tiempo no alcanza jeje pero mejor no lo pudiste decir (Soy culpable de empezar cosas y abandonarlas, claro... pero no es tónica general. No me gusta tirar la toalla. Prefiero no empezar algo que no terminarlo...)

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